Camejo, Cesar. Algunas reflexiones sobre aspectos epistemológicos del conocimiento histórico
68 Revista de Artes y Humanidades UNICA. Volumen 23, Nº49 / Julio-Diciembre 2022, pp. 67-72
Universidad Católica Cecilio Acosta – Maracaibo – Venezuela ISSN: 1317-102X e – ISSN: 2542-3460
La visión positivista de la historia
Se puede decir que el mayor representante del positivismo del siglo XIX es Augusto
Comte (1798-1857). En líneas generales este movimiento postulaba el monismo
metodológico, la subordinación de la historia a los desarrollos de las ciencias naturales,
basándose para ello en una analogía fisiológica (interpretar a la sociedad como un organismo)
(p. 31). Isidore Marie Auguste François Xavier Comte fue un filósofo francés, y escritor que
formuló la doctrina del positivismo. A menudo se le considera como el primer filósofo de la
ciencia en el sentido moderno del término. Las ideas de Comte también fueron fundamentales
para el desarrollo de la sociología; de hecho, inventó el término y trató esa disciplina como
el logro supremo de las ciencias.
Walsh sostiene que, en líneas generales, los historiadores han mostrado ninguno o
muy poco interés en este programa cientificista prefiriendo abocarse a la comprensión del
curso de los acontecimientos, a través de mostrar “qué” sucedió (describir lo acontecido) y
conducir el “por qué” a la búsqueda de dotar de sentido o significado a lo acontecido
históricamente. (Walsh; 1983: 14) Para Walsh la posición positivista respecto de las leyes
consiste en un uso abstracto de las generalizaciones. No obstante, como más adelante se
expondrá, el autor encuentra un uso más apropiado de las generalizaciones en la historia a
partir del concepto de “coligación”.
El programa positivista pretende eliminar cualquier apelación a un postulado
especulativo o metafísico. Sin embargo, su búsqueda e imposición de leyes universales al
devenir histórico no se encuentra justificada, pues no aporta fundamento empírico alguno
para sus afirmaciones, todos sus argumentos en este punto son derivaciones por analogía del
proceder de las ciencias naturales.
El concepto que se tiene acerca de las ciencias sociales y la historia como ciencia, no
está desvinculado de la manera como se entienden los procesos de enseñanza y aprendizaje
acerca de esos contenidos curriculares. En todo proceso de concreción curricular la definición
epistemológica y disciplinar constituye un punto crucial, porque a través de ella el mundo
social es visto de una u otra manera. Por otra parte, es necesario destacar que de la tarea que